Ahí esta, flotando sobre la
silueta imperfecta del viento, quebrando el tiempo y descifrando su paso, volviendo
eternos los segundos, los momentos. Ahí esta, brillando de astro en astro
contenida en un suspiro de la luna, iluminando el cielo y haciéndome sentir que
nunca existieron las lágrimas, las heridas. Su nombre ya no importa, ahora solo
es sentimiento, es sonrisa que deshace demonios, que quema lamentos. Es algo en
sus ojos, que alerta los sentidos y los vuelve infantes, y ahora sueñan
esperanza, sueñan colores. Ahí esta, seduciendo la esencia de la pasión,
volviendo su fuego infinito. Es misterio, es fe. Es el milagro que danza entre
los ángeles. ¿Quién pudiera alcanzar su belleza?, y profeso a si mi ilusión
envuelta en un deseo que irrumpe en mi mente como una constante inspiración
para mover universos, para reclamar mío el mundo y luego dejarlo en sus pies,
servido a sus deseos. Ahí esta, ¿no la ves?, destilando el perfume de las
flores, vistiéndolas con cada uno de sus colores. Y su nombre ya no importa, su
nombre es sensación, su nombre se vuelve emoción. Ahí esta, bailando junto a la
silueta imperfecta, discutiendo al tiempo y que así entienda que el cariño no
es cuestión de años o minutos, es materia pura del sentir, sin tic ni tac, quizá
cómplice de una sola mirada, de una única sonrisa. Esa razón que se permite la
locura para entregar todo por un pálpito del corazón, por un suspiro que se la
escapa en cada palabra suya. Ahí esta, con ella mi alma se expande abrazando el
espacio, cuan infinito sea, y ahora siento que todo es posible. Ahí esta, ¿no
la ves?, su nombre es…su nombre es amor…
No hay comentarios:
Publicar un comentario